Adiós al Hermano de San Gabriel AGAPITO MONEO RUIZ (Hno. Luis María) 20.11.1929 — 01.02.2017 |
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El Hno. Agapito nació el 20 de noviembre de 1929 en el pueblo burgalés de Cerratón de Juarros. Allí sintió la llamada a la Vida Consagrada, animado por el entonces "reclutador" Hno. Gregorio García (Hno. Benjamín). Realizó el Juniorado, Postulantado y Noviciado en la casa de "Can Valls" (San Vicente de Montalt), la casa de formación de los Hermanos, donde también hizo su profesión religiosa y donde bebió de las fuentes de la espiritualidad montfortiana, que siempre cultivó. Consagrando su vida a Jesús por las manos de la Santísima Virgen extendió siempre un fiel y sincero amor a la Madre de Dios. Su formación como Maestro y su Diplomatura en Lengua Francesa le permitieron dedicarse a su gran pasión: la educación cristiana de niños y jóvenes. Misión principal que acompañó con otros cargos y responsabilidades en la Provincia: Director de Juniorado, Ecónomo Provincial y sus 31 años como Director de Centros Educativos (Sant Adrià, La Aguilera, Barcelona y Ripollet). Con gran cariño es recordado por las comunidades educativas en las que trabajó con denuedo: Viladecans (1947-1950), Torroella de Montgrí (1950-1955; 1986-1987), Sant Adrià de Besòs (1960-1968, 1971-1974, 2007-2017), La Aguilera (1968), Castillo-Elejabeitia (1968-1970), Barcelona (1970-1971; 1974-1975; 1979-1986; 1993-2001), Sant Sadurní de Noia (1975-1979), Ripollet (1987-1993; 2001-2007). En sus últimos años de jubilación, nuestro Hno. Agapito continuaba con la misión educativa: presencia activa en el Colegio, atención a familias y profesores, visita a los enfermos, grupos de Vida Ascendente, acompañamiento a los Asociados Montfortianos, lectura espiritual... y buena conversación para todo aquel con quien se cruzase. Hasta luego, Hermano. ¡Hasta el Cielo! La misa exequial por el Hermano Agapito tendrá lugar el viernes 3 de febrero, en la Parroquia de Sant Adrià de Besòs, a las 12h. |
"Cuando llegue la hora de la muerte y de la elección definitiva,
fortalecido por tu aceptación constantemente renovada de la voluntad del Señor, asistido por María, tu Madre, alentado por tus Hermanos, dirás: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”. Pasarás de la muerte a la vida, como primicia de tus Hermanos y de los hombres por ti evangelizados". Regla de Vida de los Hermanos de San Gabriel, núm. 83 |